Tegucigalpa – Miles de hondureños y simpatizantes del oficialista Partido Nacional participaron hoy, por separado, en las principales ciudades del país en marchas contra la corrupción y la impunidad, en la que exigieron castigo para los que desfalcaron al Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS).
Los manifestantes, denominados “los indignados”, que no dejaron de salir a las calles pese a la lluvia que azota a la capital hondureña, portaban linternas, banderas del país y pancartas con mensajes contra la corrupción y el Gobierno que preside Juan Orlando Hernández, a quien han pedido que renuncie.
“El pueblo anda protestando porque nos parece que es una injusticia y un crimen de lesa humanidad que se hayan robado el dinero del Seguro Social”, dijo a Efe el hondureño Carlos Velásquez, quien participó en la movilización.
La marcha comenzó en el Bulevar Morazán de Tegucigalpa y se dirigió a la sede de la embajada de Estados Unidos, donde los manifestantes exigieron apoyo de esa legación para reclamar a las Naciones Unidas la instauración de una Comisión Internacional Contra la Impunidad en Honduras (CICH), similar a la que existe en Guatemala.
“Queremos recuperar el dinero, es justo, el pueblo se expresa porque necesita que se le haga justicia, no es posible que la impunidad siga caminando por nuestras calles, continuaremos en la calle hasta que se haga justicia, no es posible que pasen cien años y que esto se vuelva a repetir”, subrayó Velásquez.
El millonario desfalco del Seguro Social es uno de al menos doce casos de corrupción revelados en los tribunales de Justicia de Honduras que salpican a los últimos tres Gobiernos, presididos por Manuel Zelaya, Porfirio Lobo y Hernández.
Una Comisión Interparlamentaria nombrada en mayo pasado por el Parlamento presentó la semana pasada un informe sobre cómo se van desarrollando los juicios de doce casos de corrupción, algunos de ellos registrados durante la gestión de Zelaya.
El analista político Álvaro Cáliz, por su parte, dijo a Efe que la protesta demuestra “la indignación” del pueblo hondureño que “ha acumulado golpe tras golpe de despojo en los últimos años”.
El pueblo hondureño “está despertando cada vez más y está mirando la realidad, esto muestra el camino hacia el futuro y si no se corrige esto mañana no va poder controlarse”, subrayó Cáliz, que participó en la marcha, que concluyó con la entonación del himno de Honduras frente a la sede de la embajada estadounidense.
En las “marchas de las linternas” o de “los indignados” participaron jóvenes y muchos padres de familia acompañando a sus hijos, entre los que también figuran niños, lo mismo que grupos de amigos, vecinos de barrios, compañeros de trabajo o de estudios, entre otros.
Las marchas, que se celebran desde hace dos semanas, son pacíficas y con consignas que son amenizadas a ritmo de tambores y otros instrumentos.
En otro sector de Tegucigalpa y en San Pedro Sula, las principales ciudades de Honduras, centenares de simpatizantes y dirigentes del oficialista Partido Nacional marcharon contra la corrupción y expresaron el apoyo de la sociedad al presidente Hernández.
El escándalo en el Seguro Social involucra a políticos, empresarios, altos funcionarios, fiscales y periodistas, entre otros, que recibieron favores económicos, según las investigaciones de las autoridades.